Machu Picchu es una de las siete maravillas del mundo, el destino más visitado de Perú y un imperdible entre los viajeros que recorren Sudamérica, razón por la cual las autoridades peruanas tienen un intenso control y cuidado de la zona.
Pues bien, algo falló este jueves cuando el personal encargado de la mantención del sitio arqueológico ubicado en las cercanías de Cusco, encontró a dos turistas argentinos durmiendo en la ciudadela.
Según una nota de La República, la situación se reveló a eso de las seis de la mañana cuando los guardaparques realizan las primeas inspecciones para recibir a los primeros grupos de turistas que suben desde Aguascalientes.
Gran sorpresa se llevaron los funcionarios cuando en una de las habitaciones de una de las estructuras incas, se encontraron con dos mochileros argentinos que estaban en los brazos de Morfeo al interior de sus sacos de dormir.
El jefe del parque, Fernando Astete, detalló que ingresaron por el puente para vehículos de la localidad de Aguas Calientes, ascendieron por la carretera Hiram Bingham e ingresaron tras romper la malla de un costado de la vía. “Los dos fueron intervenidos por el personal de vigilancia, en uno de los recintos del sector de las fuentes de agua, donde habían pernoctado”, indicó Astete la nota.
“No es que la seguridad no los haya visto tras la última ronda de vigilancia, tampoco que los haya dejado quedarse ahí. Ellos ingresaron a las tres de la madrugada y no se les ocurrió mejor idea que quedarse a dormir”, indicó el administrador de Machu Picchu, Miguel Zamora, al diario “Correo”.
Los trasandinos fueron identificados como Santiago Bertonni de 22 años y Franco Pistonne de 21 años, quienes ingresaron por uno de los sectores de salida del parque y se quedaron en una de las estructuras de piedra.
Ambos jóvenes fueron detenidos ya que cometieron una falta de acuerdo a las leyes peruanas y las reglas de la administración de Machu Pichu, aunque luego fueron liberados ya que no existió daño patrimonial al complejo incaico.